"Mantener la calma y seguir adelante"

Londres, 1939, Segunda Guerra Mundial. Con el objetivo de elevar la moral de la ciudadanía ante una posible invasión nazi, la Corona Británica diseñó panfletos para pegar en las calles inglesas con la inscripción 'Keep calm and carry on' ("Mantén la calma y sigue adelante"). Los panfletos nunca salieron a la calle y se conocieron recién a mediados de 2000 y hoy son piezas de diseño para el estampado de alguna prenda.

Sin guerras venideras, ni aviones nacionalsocialistas sobrevolando nuestras cabezas, en cuatro días La Sinfónica librará su última batalla en busca del objetivo. Con un equipo diezmado, apuntado e incómodo, enfrentará al ahora único líder del torneo en una verdadera final de torneo. No será un partido más. La Sinfónica se juega mucho más que tres puntos que lo pondrían como único puntero. Frente a La Chiruza, La Sinfo deberá salir a defender más que nunca su orgullo, su honor, mancillados en los últimos 20 días con tanta expulsión y sanción. Dicen que las finales se ganan, no se juegan. Para eso, La Sinfónica toda, cada uno de sus integrantes, deberá jugarla con la cabeza más fría que nunca, pero el corazón ardiente. Cada uno debe ser lo suficientemente inteligente para entender que se juega la última chance para lograr el objetivo planteado y que para conseguirlo se necesita de todos sus hombres enfocados nada más que en el triunfo, en doblegar al rival, en dejarlo todo y que cualquier condimento extra puede desviar la atención y obstaculizar el camino.

Miremos para adelante, Sinfo. En medio de tanta oscuridad, allá adelante aparece nuestro objetivo, brillante y enaltecedor, a la espera de un dueño. La Sinfónica merece y puede ser campeón. Sólo depende de sí mismo. Sólo depende que mantenga la calma y siga adelante...

Uno x uno

- Rasta: Aplausos. Se la bancó heroico pese a su lesión. Sacó varias pelotas difíciles y ninguna responsabilidad en los goles. Mucho huevo y amor propio para dejar todo por La Sinfónica. Gracias Rasta, actitudes como éstas son las que deberían contagiar.

- Guillermo Casal: Buen partido del capitán. Seguro en la marca, le pegaron mucho y se la bancó. Intentó jugar limpio, fue uno de los pocos a los que no amonestaron e inteligente para no entrar en la rigurosidad y mal modo del árbitro. Si querés seguir con vida, hay que escuchar al capitán.

- Facundo March: Pese a la temprana amarilla y otra vez por protestar, redondeó un partido discreto. Como nunca, aprovechó su altura para ir bien de arriba y se agrandó cuando el equipo quedó con uno menos. A corregir las amonestaciones.

- Julián Santamarina: Bien en lo defensivo. Se comprometió bien con March a la hora de los relevos y muy seguro en la marca. Cuando pudo, fue al ataque. La mala, lo amonestaron temprano por hablar y se condicionó el resto del partido. No queda otra que cambiarlo para lo que viene.

- Juan Martín Anziano: Era difícil igualar lo hecho la fecha pasada, pero se las rebuscó para volver a ser figura. Trató de pararse cerca de los centrales cuando atacaba el rival, y de darle fútbol a La Sinfo cuando tenía la pelota. Su mejor versión, cuando el celeste se quedó con uno menos. Mucho sacrificio.

- Nicolás Quintana: En el primer tiempo el equipo no jugó mucho con él y pasó desapercibido. En el ST, fue todo lo contrario: el equipo lo aprovechó y respondió aguantando de espaldas. Así encontró su tanto, el tercero de La Sinfo, y en el que terminó siendo expulsado en el festejo. Se pierde el gran partido de la semana que viene...

- Federico Canteli: Muy buen partido. Fue el que todos queremos ver: dos goles, sacrificio, haciendo un trabajo que no está acostumbrado, ubicado como mediocampista central ante las expulsiones. Este es el camino Pájaro...

- Agustín Manfredi: Si hay algo que no se le puede criticar es la entrega y actitud. Jugó un aceptable partido dejando todo en cada pelota y lo pasaron muy pocas veces. Salió por un cambio táctico y alentó desde afuera. De a poco le responde al DT por no haberlo tenido en cuenta al inicio de este campeonato.

- Ezequiel Manfredi: Lo dejó todo. Jugó como lateral defensivo (no es su puesto) y no lo hizo mal. Después se paró de volante en busca de la hazaña que no llegó. En un cruce con un defensor rival terminó expulsado. ¡Gracias por bancarnos Negro!