No sabíamos lo que era, pero acá está la primer tapa post-derrota en una final de campeonato. Frente a un buen rival, La Sinfo arrancó en deventaja desde el inicio y sin mucho fútbol nunca pudo lograr el empate para estirar la definición. A 2' del final, y de penal, Néstor sentenció la historia para gritar campeón. Pese al sabor amargo, el plantel se despidió entre aplausos y con la cabeza erguida, cerrando un semestre que incluyó ascenso, un nuevo equipo y un gran grupo detrás que le apuntará con todo a lo que se viene en una categoría más competitiva. Además, Cacciacane buscó sacar rédito marketinero y metió nueva camiseta de color rosa. Eso sí, con el 0-1 en contra, duró sólo un tiempo. Todo, en un Olé con más orgullo que nunca.
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